GE Lighting ha llevado a cabo uno de los proyectos de iluminación más importantes de Castellón. Se han instalado más de 1.200 luminarias en la ciudad reemplazando las antiguas lámparas de vapor de mercurio. Los resultados del cambio se han traducido en un ahorro energético de hasta el 70% y una significativa mejora de la calidad de la luz.
Castellón de la Plana, con una población de aproximadamente 180.000 habitantes, es la capital de la provincia homónima dentro de la Comunidad Autónoma de Valencia. Esta ciudad medieval de la Costa de Azahar fundada en 1251 cuenta con un agradable clima y posee numerosos espacios de gran interés ecológico como las Islas Columbretes, de origen volcánico, en las que se encuentran varias especies de aves en peligro de extinción y sus fondos marinos, uno de los destinos favoritos para los amantes del submarinismo. Esta riqueza natural e histórica hace de Castellón de la Plana uno de los lugares preferidos de los visitantes del litoral español.
Con el objetivo de reformar las instalaciones de alumbrado público, el Ayuntamiento de Castellón de la Plana y GE Lighting han llevado a cabo un interesante proyecto que debía cumplir con dos requisitos imprescindibles: en primer lugar mejorar la eficiencia energética de la población y reducir así el gasto energético; y en segundo lugar, instalar un tipo de luminaria que fuera de última generación y que mejorara la calidad de la iluminación.
Uno de los principales retos era instalar equipos que supusieran un mayor ahorro energético en línea con la actual normativa europea de eficiencia. En este proyecto debían eliminarse todas las lámparas de vapor de mercurio existentes y sustituirse por lámparas de vapor de sodio de alta presión, halogenuros metálicos cerámicos o LEDs, cuya eficacia es mucho mayor. También se buscaba mejorar la calidad de la luz, eliminar la contaminación lumínica, y mejorar la seguridad de determinadas zonas sin luminarias.
Soluciones GE Lighting
GE Lighting junto a los ingenieros municipales ha liderado la primera actuación en iluminación pública en la ciudad de Castellón con tecnología LED, que sumada a la utilización de una gran parte de luminarias con lámparas de halogenuros metálicos cerámicos, han conseguido mejorar la calidad de la iluminación en la ciudad. Además, para conseguir los objetivos de eficiencia, se han sustituido lámparas de vapor de mercurio y se ha dotado a las mismas de elementos de regulación del flujo luminoso en el caso de que no existieran. Para ello, se han utilizado equipos de doble nivel en cada luminaria con línea de mando desde el cuadro eléctrico del sector de alumbrado, reguladores de flujo luminoso centralizados y balastos electrónicos con capacidad de regulación individual y lineal de la tensión en la lámpara.
Las 1.292 luminarias instaladas suponen un ahorro energético que oscila entre el 10% y el 70% en función de la calle o instalaciones. Además, en muchas zonas se ha subido entre 3 y 4 puestos en la Clasificación de Eficiencia Energética. Se ha conseguido además aumentar la seguridad vial y peatonal. El Ayuntamiento destaca la sustancial mejora en “la instalación de alumbrado público en algunos puntos concretos como el Parque de Mérida y la Zona deportiva del Primer Molí”.
Este proyecto supone una clara apuesta, tal como explican desde el consistorio, por “la instalación de equipos electrónicos de doble nivel que proporcionan un mayor ahorro energético”. Esto ha sido posible gracias a las lámparas de GE de halogenuros metálicos cerámicos CMH, con las que se ha podido aplicar reducción de consumo (en determinado horario nocturno) incluso con equipos magnéticos.