El sector agroalimentario de Almería, uno de los más potentes de Andalucía, con una producción de más de 2,5 millones de toneladas al año y una facturación anual de más de 1.800 millones de euros cuenta con un gran potencial de ahorro energético lo que le permitiría incrementar su competitividad frente a otras regiones, pues los costes energéticos descenderían al tiempo que la producción estaría asociada a valores de sostenibilidad energética y respeto al medio ambiente.
La Agencia Andaluza de la Energía,hasta la fecha, ha subvencionado ocho proyectos energéticos a empresas agroalimentarias almerienses que han recibido un incentivo de 163.200 euros. Ello ha permitido movilizar una inversión superior a los 700.000 euros, posibilitando un ahorro de 488 toneladas equivalentes de petróleo al año (tep), energía suficiente como para abastecer las necesidades anuales de casi 600 viviendas.
Entre los proyectos apoyados por la Agencia Andaluza de la Energía, cabe destacar los llevados a cabo en almazaras de las localidades de Canjáyar, Tabernas y Abrucena, con el objetivo de reducir en un 90 por ciento el consumo energético en el proceso de obtención del aceite mediante la sustitución de los equipos convencionales por otros de mayor eficiencia.
Asimismo, también con el apoyo económico de la Agencia, varias cooperativas comercializadoras de frutas y hortalizas van a acometer la mejora de sus instalaciones de iluminación interior, tanto de las oficinas (se sustituyen lámparas fluorescentes, halogenuros metálicos, halógenas, etc., por sistemas de iluminación LED) como en la nave de manipulación (se sustituyen lámparas de vapor de mercurio y halogenuros metálicos por lámparas LED) con un ahorro global estimado superior al 40%. Se trata de proyectos con una inversión cercana a los 100.000 euros que pueden ejecutarse a través de empresas de servicios energéticos a efectos de facilitar a los empresarios la apuesta por el ahorro y la eficiencia y las fuentes renovables.
Medidas a implantar
Las actuaciones de mejora energética que pueden acometer las empresas del sector agroalimentario pueden ser, entre otras, el aumento de eficiencia en las instalaciones frigoríficas, la sustitución de motores eléctricos por otros de alta eficiencia energética e incorporación de variadores de frecuencia, la reducción del consumo térmico, el aprovechamiento de calores residuales y el uso de calderas de biomasa en las industrias transformadoras o las mejoras en el sistema de iluminación.
Resulta destacable también la posibilidad de instalar sistemas de cogeneración para climatización de una nave de trabajo.
Mediante esta fórmula, que ya utilizan numerosas empresas andaluzas, se mantienen refrigeradas las instalaciones durante todo el año (mejorando la calidad de las frutas u hortalizas), al tiempo que se produce energía eléctrica para verter a la red o autoconsumir en las propias instalaciones.
El paso previo en la toma de decisión para la ejecución de estos proyectos debe ser la realización de una auditoría energética. A partir de un análisis energético de la situación actual de la empresa, se estudian las posibles medidas de eficiencia energética a llevar a cabo, para las que se estima el ahorro que se prevé conseguir, tanto en términos energéticos como económicos, así como su rentabilidad. En la actualidad, existe una oferta cada vez mayor de Empresas de Servicios Energéticos (ESEs), que podrían acometer la inversión asociada a estos proyectos, recuperando la inversión realizada en concepto del ahorro energético alcanzado o en contraprestación a la energía térmica que se le suministre.
Todos estos proyectos se pueden subvencionar a través del Programa de Subvenciones al Desarrollo Energético Sostenible de Andalucía A que gestiona la Agencia Andaluza de la Energía, siempre que cumplan unos requisitos mínimos de ahorro energético y que los proyectos no estén iniciados antes de realizar la solicitud. Desde el año 2005 se han concedido 228 incentivos a empresas agroalimentarias en Andalucía, con una cuantía que alcanza los 6,8 millones de euros y una inversión de 42,5 millones de euros. Esto posibilitará un ahorro de 37.103 toneladas equivalentes de petróleo al año y una reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de 73.136 toneladas de anuales, lo que equivale a retirar de la circulación casi 30.000 vehículos.